Ingredientes:
- Harina
- Leche
- Huevos
- Merengue
- Azúcar
La palabra “merengue” viene de francés “meringue”, que derivó en “merienda”. Se refiere a un postre que se elabora con clara de huevo montada y azúcar, que puede ser de diferentes sabores como vainilla o almendra.
En repostería se utilizan tres tipos básicos de merengue: el merengue francés, el merengue italiano y el merengue suizo. Todos utilizan como ingredientes básicos clara de huevo y azúcar, así como se pueden añadir colorantes y aromatizantes.
Merengue francés. Es el más clásico: se montan las claras a punto de nieve junto con azúcar glas. Se hornea a baja temperatura hasta por dos horas para que se seque y compacte.
Merengue italiano. Es un merengue firme producto de añadir el azúcar en forma de almíbar caliente (el llamado “punto de bola blanda”) a las claras.
Merengue suizo. Es el de mayor consistencia, difiere en su preparación en cuanto a que se disuelve el azúcar en las claras justo antes de montarlas y luego se ponen a baño maría.
Se diferencian en que la crema chantilly utiliza merengue en su preparación, además de crema de mantequilla. Se mezclan muy bien ambos ingredientes hasta obtener la textura adecuada.
Ingredientes para el bizcocho
- 6 huevos enteros
- 180 g harina
- 180 g azúcar
- 1 limón (ralladura)
Ingredientes para el merengue
- 250 g azúcar
- 250 g claras (aprox. 6)
- 250 g azúcar lustre
- Para el bizcocho: batir las claras a punto de nieve y guardar en refrigeración mientras se baten las yemas con el azúcar. Incorporar a las claras con movimientos envolventes. Se deja enfriar de nuevo y se corta en tres láminas. Mientras tanto, se hace un almíbar disolviendo azúcar con agua, se pone al fuego en un cazo y se deja espesar un poco, para después enfriar.
- Para el merengue: se baten las claras a punto de nieve y se añade gradualmente el azúcar hasta que esté fuerte, colocando en baño maría unos minutos y después retirarlo y seguir batiendo. Cuando se formen picos, añadir azúcar lustre con movimientos envolventes.
Se pasa cada lámina del bizcocho por el almíbar y se cubre con merengue. En la última capa se cubre encima y a los lados. Con una manga pastelera con boquilla rizada formar los picos característicos en la superficie. Quemar con un soplete para obtener el tono tostado y ya está.